Se ha mencionado la posibilidad de cerrar las fronteras y evitar que ciertos productos extranjeros ingresen a nuestro país, pero ¿Se entiende que es el comercio internacional? ¿Hay una relación entre comercio internacional y globalización? ¿Actualmente ya contamos con restricciones para la importación de determinados productos?, ¿Restringir las importaciones en general sin contar con los criterios actuales sería perjudicial? estas y muchas otras dudas han surgido en las últimas semanas.
Es necesario entender primero el alcance del comercio internacional, para luego comprender la relación entre importaciones y la globalización, para llegar a comprender las implicancias de restringir las importaciones
¿Cómo entendemos al comercio internacional?
En el comercio internacional, encontramos como premisa básica el intercambio de mercancías entre personas ubicadas en diferentes naciones, permitiéndose el flujo de mercancías a través de los incentivos que los gobiernos de cada país realizan a través de su legislación interna y con la firma de diferentes acuerdos, convenios y tratados internacionales.
Debemos tener en cuenta que el gobierno de cada país no es el que realiza las importaciones o exportaciones, sino que estas son realizadas por personas naturales y por las personas jurídicas (empresas).
Por ello, podemos señalar que nuestro país, lo queramos entender o no, se encuentra inmerso en un proceso de globalización que permite el flujo constante de una gran variedad de mercancías.
¿Cuál es la relación entre importación y globalización?
Joseph E. Stiglitz, nos señala que la globalización, “fundamentalmente, es la integración más estrecha de los países y de los pueblos del mundo producida por la enorme reducción de los costos de transporte y comunicación, y el desmantelamiento de las barreras artificiales a los flujos de bienes, servicios, capitales, conocimientos y (en menor grado) de personas a través de las fronteras”.(1)
Así mismo, debemos tener en cuenta que la importación permite “…el ingreso de mercancías al territorio aduanero para su consumo, luego del pago o garantía según corresponda, de los derechos arancelarios y demás impuestos aplicables, así como el pago de los recargos y multas que hubieren, y del cumplimiento de las formalidades y otras obligaciones aduaneras”.(2)
Por ello, nuestro país dentro del marco de la globalización y, habiendo firmado diferentes compromisos internacionales (convenios, acuerdos y tratados) da el marco para que, tanto las personas naturales como las jurídicas, puedan realizar la importación de los productos que se consideren necesarios consumir en nuestro país.
¿Actualmente ya contamos con restricciones para la importación de determinados productos?
Existe actualmente un listado de mercancías cuya importación se encuentra restringida, pudiéndose señalar que “…son aquellas que por mandato legal requieren la autorización de una o más entidades competentes para ser sometidas a un determinado régimen aduanero”. (3)
Cualquier tipo de restricción de mercancías debe sustentarse en una política de estado acorde a los diferentes compromisos que se han venido asumiendo por el Perú, recordando que los mismos implican una reciprocidad, es decir, damos beneficios a cambio de beneficios similares.
Las restricciones que actualmente tenemos buscan “proteger o preservar la salud y vida de las personas, la moral pública, el patrimonio histórico y cultural, así como conservar los recursos naturales, entre otros objetivos”. (4)
¿Restringir las importaciones en general sin contar con los criterios actuales sería perjudicial?
Las restricciones vigentes para la importación se encuentran dentro del marco internacional para un comercio internacional más justo, por ello, nuestro país al igual que los demás debe tener presente que no se puede restringir indiscriminadamente el ingreso de mercancías.
Existe la figura de barreras al comercio internacional, ya sean arancelarias (tributos para las importaciones) o no arancelarias (diferentes requerimientos técnicos o adicionales), las que implican sanciones para los países que las promueven.
En consecuencia, el implementar restricciones masivas y sin un sustento implicaría sanciones para nuestro país, esto en el marco de los compromisos internacionales (acuerdos, convenio, tratados, etc.)
No olvidemos que, si negamos las importaciones, por reciprocidad, nos negarán beneficios para nuestros emprendedores que exportan en pequeñas cantidades perdiendo su participación en el comercio internacional.
Fuentes:
- (1) STIGLITZ, Joseph E. El malestar de la Globalización. Bogotá, Novas, p.34.
- (2) SUNAT | Sobre Importación
- (3) y (4) SUNAT | Mercancias restringidas y prohibidas
Christian David Corrales Otazú
Estudios de Doctorado en Derecho, Magíster en Derecho de la Empresa por UCSM, estudios de Segunda Especialidad en Gestión del Comercio Exterior por UNSA, Especialista en Derecho Tributario Internacional por Universidad Austral de Argentina, con Capacitaciones especializadas por CBP (Customs and Border Protection – Aduana U.S.A), CIAT y OMA.
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